Hoy, 24 de Diciembre, el pueblo nicaragüense estará celebrando la fiesta católica más querida por todos, el nacimiento del niño Jesús en un pueblo llamado Belén de Judea, hace 2011 años. Es su nacimiento, el que define a la humanidad, de acuerdo a los historiadores, en Antes y Después de Cristo. Es una celebración que alrededor del mundo llena de júbilo y alegría a millones y millones de cristianos, que ven precisamente en Jesús al Dios hecho hombre. Es Lucas, el evangelista quien describe la aparición de un Ángel del Señor a los pastores de Belén anunciando el nacimiento de Jesús: “Hoy en la ciudad de David, ha nacido para ustedes un Salvador, que es el Mesías y el Señor…”
Cuenta la historia que en la época del nacimiento de Jesús, gobernaba el Rey Herodes, quien al oír en boca de los tres Magos que llegaban de Oriente a buscar al Rey de Reyes para adorarle, decidió dar muerte al recién nacido y con él a todos los niños menores de dos años de Belén y sus alrededores. Ante esto y avisados por un Ángel del Señor, Jesús, José y María huyeron hacia Egipto, hasta la muerte de Herodes, cumpliéndose la profecía de que un Ángel revelaría a José el momento de partir hacia Nazaret, en la región de Galilea. De ahí su identificación como Jesús El Nazareno. Para los católicos del mundo entero, Jesús es el hijo de Dios hecho hombre, quien precisamente por esta ambigüedad, Dios y Hombre, representa a la iglesia católica, humana y divina. Es Dios mismo quien ofrece a su hijo para la redención de los pecados del mundo, un sacrificio que llegará 33 años después de su nacimiento.
Este 24 de Diciembre, día en que celebraremos la Natividad en unión de nuestras familias o con el recuerdo de las mismas, es un momento propicio para aprovechar y meditar todo cuanto acontece alrededor de nuestras vidas, para analizar cuanto hemos vivido y vivimos actualmente, pero sobre todo, para pensar acerca de nuestro futuro. Se dice que desde la creación, Dios dotó al hombre de la virtud de poder elegir su destino, le dio la capacidad de decidir y discernir entre el bien y el mal, le dio el libre albedrio, extrañamente tras haberle dado el conocimiento, lo que no se le fue dado al resto de la creación. Lamentablemente, el hombre ha preferido el camino fácil y en ese camino ha arrastrado al mundo hacia su propia autodestrucción. Contaminación ambiental, despale inmisericorde, guerras fratricidas, muchas de ellas en nombre de Dios, hambre y otras plagas, son producto de la obsesión del ser humano por inagotable sed de enriquecimiento y conquista. Es el hombre mismo quien atenta contra sí mismo y contra la creación. No importa a quien o a cuántos se afecte, sobre todo si habrán ganancias de por medio.
Nuestro país no ha sido la excepción. Habiendo sido dotado generosamente de tierras fértiles, grandes riquezas naturales, amplios recursos para poder vivir en muchas mejores condiciones que otros países, nos arrastramos en medio de una pobreza vergonzante. Ostentamos el nada envidiable record de ser el segundo país mas pobre de América. Un altísimo porcentaje de nuestra población vive en condiciones de pobreza y pobreza extrema, es decir, miles sobreviven con menos de dos y un dólar al día. Ante esta situación cabe preguntarnos, por qué vivimos así? Dónde están todos los recursos que harían posible poder tener una vida digna para todos? Que han hecho los que nos han gobernado y nos gobiernan para revertir esta triste y lamentable situación? Por qué unos viven como Herodes y la mayoría vive como la familia de Jesus?
A diario oímos y leemos los casos de corrupción, de antes y de ahora, de miles de millones de dólares que han enriquecido obscenamente a unos pocos, a costa de la miseria de la gran mayoría del pueblo. Millones de dólares que han salido de las arcas del estado para satisfacer la voracidad de funcionarios que se han acostumbrado a la vida fácil y a costa, no precisamente del sudor de su frente. Con estupor vemos el grosero enriquecimiento de quienes, por los principios que dicen sustentar, deberían ser los guardianes de la dignidad del pueblo, los que deberían velar por los valores de honestidad y respeto de la función pública, los garantes de que nunca jamás podría haber un retorno al pasado de ignominia y no quienes sean los que exhiban, con el mayor desparpajo, una ambición desmedida de poder y una montaña de riquezas mal habidas.
Corrupción, sed ilimitada de poder, enriquecimiento ilícito y otras lacras sociales, no fue lo que quiso enseñar a la humanidad quien hoy cumple un año más de nacido. El niño Jesús, con su nacimiento quiso entregar un legado de paz a los hombres de buena voluntad. Un verdadero mensaje de unidad entre quienes habitamos el hogar común de todos: la tierra. Siempre estamos a tiempo de rescatar la esencia misma del nacimiento del Dios hecho hombre. Podemos elegir entre seguir las enseñanzas del Divino Niño o el camino de Herodes. Este día es el marco perfecto para tomar nuestra decisión.
En el ánimo de que tomemos la mejor decisión en el devenir de nuestras vidas, les deseamos a todos una Feliz Navidad. Que la paz y la concordia brillen en todos los hogares nicaragüenses.
Muy buen trabajo mi amigo, te felicito, que las energias del Espiritu Santo caigan sobre ti y te de sabiduria, para que cada escrito como este, nos llegue y nos haga reflexionar.
ResponderEliminarEnrique Calderon
Gracias por esa tenaz labor de escribir, comunicar, si los misiles,las instrucciones nefastas de organizaciones enpeñadas al mal,los corruptos, los padres de la patria,las ordenes de guerra a paises y pueblos inocentes las cambiasemos por por un teclado como tu lo haces enriqueciendonos el sentido comùn, la logica- el mundo se enrumbaría por otros horizontes muy similares a todos los centeneraes de buenos deseos para navidad y año nuevo que llueven en Facebook y se desvanecen como la neblina al caer el dia por falta de apoyo y discernimiento claro de la realidad. Gracias por tu gran esfuerzo querido Roberto, haz ido en tu corto camino por la vida dando muestras de esa gallardia que te caracteriza, debajo de las balas en tu sueño libertario y ahora capeandote de los garrotazos de quienes fueron algun dia tus compañeros del camino, las mascaras se van cayendo cada dia,Gracias por ser ejemplo, verbo y no substantivo.
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