Nuevamente
el campo nicaragüense se viste de sangre y muerte en lo que parece ser un
conflicto armado aun de baja intensidad, pero que crece continuamente y cada
vez es mas difícil de ocultar, a pesar de la autocensura de la mayoría de los
medios por temor a contrariar a las autoridades gubernamentales y militares,
al miedo evidente de la población de hablar en público de estos hechos, al
secretismo gubernamental y a la política oficial de no reconocer grupos armados
con fines políticos que se movilizan en varios lugares del país.
GOLPE
Y CONTRAGOLPE
Primero
fue la emboscada criminal a cinco policías que trasladaban a un capturado, que
las autoridades identificaban únicamente como “Jefe de una banda delincuencial”
y casi una semana después en la Comarca Santa María de Tazua, en la zona del
Cua – Bocay, escenario de cruentos combates en los años 80’s, la muerte con
claros indicios de una ejecución, de Francisco Reyes Méndez, alias “Cinco Pinos”
y del productor Pedro Pablo Díaz López, vinculado a la Iglesia Católica como Cuadro
Pastoral, de acuerdo al Sacerdote José Ramón López, actual Cura Párroco de
Santa María de Pantasma y que según las mismas declaraciones, no estaba vinculado
absolutamente al grupo de Cinco Pinos. Siete muertos, siete nicaragüenses que
pierden la vida de manera violenta en la zona montañosa de nuestro país, en una
escalada que nada bueno presagia a la nación.
MODUS
OPERANDI DE LAS FUERZAS GUBERNAMENTALES
Haciendo
memoria de las dos acciones acaecidas en Santa María de Pantasma -El Tamalaque
y la Mochila Bomba- y cotejando la información de la muerte de Reyes Méndez y Díaz
López, se puede analizar una constante en el mecanismo de retaliación de las
Fuerzas Armadas, Ejercito y Policía, que poco a poco se viene trasformando en
un peligroso Modus Operandi: Ningún capturado, todos muertos, todos con signos
de tortura y ningún testigo. En los casos de Pantasma, el muchacho masacrado en
El Tamalaque nada tenía que ver con el asunto, únicamente estaba en el lugar y momento
equivocado y en el caso de la mochila bomba, el mensajero que llevó su carga mortal
fue ejecutado también para no dejar testigos, En la acción de Santa María de
Tazua, el que se encontraba con Cinco Pinos, Pedro Pablo Díaz López fue
igualmente ejecutado y ambos presentaban evidentes signos de haber sido
torturados, de acuerdo a las versiones de sus familiares. Sin embargo, tanto en
la primera acción, la de la mochila bomba, como en esta de ahora, quedaron al
menos un sobreviviente en cada una de ellas. El primero narró los horrores que
le tocó vivir después de la explosión y como logró huir del lugar y en el
segundo caso, aparentemente el hijo de Díaz López, logró escapar de una muerte
segura y posiblemente en los próximos días conozcamos más del hecho, si es que
sobrevive a la segura cacería que debe estar en marcha para capturarlo. Todos
los que estuvimos, de un bando y del otro, vinculados al conflicto bélico de
los años 80’s sabemos por experiencia propia que la situación que se vive en el
campo nicaragüense está lejos de acabar y más bien está incubando más odio al
gobierno y a su brazo armado. Lo vimos en Pantasma y Nueva Guinea a comienzos
de la Revolución.
BANDAS
DELINCUENCIALES O GRUPOS ARMADOS MOTIVADOS POLÍTICAMENTE?
La política
oficial del gobierno y sus fuerzas armadas es desconocer la existencia de
grupos armados con motivaciones políticas identificándolos solamente como
grupos delincuenciales, narcotraficantes y abigeos. Es obvio que esta política
se origina en el hecho de que bajo este tratamiento, ni el Ejército ni la Policía
están exigidos a cumplir con ciertas obligaciones referidas al Derecho
Internacional Humanitario en cuanto a limitar los efectos derivados de los
conflictos armados, uno de los cuales es el respeto a la vida de los
prisioneros. Se podrá alegar por parte del gobierno y las autoridades militares
y policiales que en la emboscada a los policías no hubo misericordia con ellos,
pero habría que aclarar qué es una emboscada, qué es un combate y qué es un
golpe de mano, en el cual se toman prisioneros luego de una rápida acción militar
en la que concurren la sorpresa, la información de inteligencia y la
contundencia misma en la ejecución de dicha acción. La política de exterminio,
de tierra arrasada, de cero capturados, cero prisioneros y cero testigos tendrá
sus consecuencias nefastas en un mayor accionar de los grupos armados. Es la
ley de los conflictos de baja intensidad, nunca se acaban y cada vez crecen más
y más. Solo los ciegos y torpes no lo advierten y también los que nunca
estuvieron en la guerra.
MOTIVACIONES
POLÍTICAS
La mayoría
de los grupos armados conocidos, efectivamente tienen claras motivaciones políticas.
Se conocen videos, declaraciones y comunicados. Muchos de ellos lo han
expresado, por lo que se podrían identificar algunas causas para haber tomado
la decisión de enmontañarse: La primera, los fraudes electorales del 2008, del
2011 y el 2012, en donde claramente muchos perdieron la confianza en el
sufragio electoral como forma válida para cambiar autoridades nacionales,
regionales y municipales. El mensaje del gobierno fue contundente, ustedes votan
pero yo cuento los votos, al mejor estilo de Modesto Salmerón. La segunda, la persecución
de familias vinculadas a los partidos de oposición, sobre todo liberales,
llevada a cabo por Secretarios Políticos del partido de gobierno, policías y
autoridades municipales del orteguismo, probablemente sin una directriz
superior, posiblemente motivados por el odio, el revanchismo y la insidia, eso sí,
provocada por el discurso oficial gubernamental. La tercera, la exclusión, el
rechazo y la estigmatización de familias opositoras identificadas con nombres y
apellidos por parte de las autoridades policiales, municipales y partidarias.
No tienen derecho a nada, no existen y para variar, son las principales
sospechosas de cualquier cosa, hasta del cambio climático. Mejor caldo de
cultivo no puede haber.
MOTIVACIONES
ECONÓMICAS
La brutal
pobreza en el campo, que las autoridades, llámense asesores, ministros,
diputados, jerarcas partidarios o miembros de la nueva oligarquía orteguista,
se desviven en desconocer y negar, está provocando que muchas cabezas de familia
recurran a la delincuencia como forma de sobrevivir. Inician como salteadores
de caminos, abigeos, maleantes de medio tiempo, hasta que topan con algún grupo
armado y son atraídos por estos sumándolos como nuevos reclutas, asignándoles
el territorio que conocen mejor, donde tienen base social y donde pueden a su
vez, reclutar nuevos miembros. Esto no es el descubrimiento del agua salada,
cualquiera que haya estado en la Resistencia se los puede decir, sin embargo los
que están al frente del país están más interesados en contar la plata que les
llega a borbollones producto de sus enormes negocios, que en atender algo que más
temprano que tarde se les convertirá en un enorme problema que no están
preparados para lidiar.
La motivación económica está tan cerca de la motivación
política, que una línea muy fina las separa y muchas veces no se sabe dónde
termina una y comienza la otra, sin embargo en los dos casos es el gobierno
quien tiene la solución a ambas y no es precisamente la política de exterminio lo
que se impone.
NICARAGUA HA VIVIDO DE GUERRA EN GUERRA, DE REVOLUTA EN REVOLUTA, DEL TIMBO AL TAMBO, DE LIDERACO EN LIDERACO, NO HA PODIDO TENER UN MOMENTO DE SOSIEGO, DE CALMA, PORQUE DECIR PAZ ES MUCHO DECIR, Y TODO MOTIVADO POR LAS AMBICIONES DESMEDIDAS DE CADA HOMBRE QUE HA TOMADO EL MANDO DEL GOBIERNO. Y A INICIOS DE ESTE SIGLO XXI CUANDO LA TECNOLOGIA ESTA FACILITANDO MUCHAS DE LAS ACTIVIDADES HUMANAS, NO FALTAN LOS DINOSAURIOS POLITICOS QUE PERSISTEN EN QUE SUS IDEAS ARCAICAS PREVALEZCAN EN TODO Y SOBRE TODOS. HASTA DONDE LLEGAREMOS?
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