“No te pido Señor
que me des dinero,
solo te pido
que me dejes cerquita de él”.
Oración del sinvergüenza
En nuestro anterior Editorial correspondiente al sábado
12 de Agosto, analizábamos el monopolio construido por la familia presidencial que
nace a partir de la importación exclusiva del petróleo por parte del grupo
empresarial perteneciente a dicha familia. Dicho monopolio, decíamos, abarcaba
la susodicha importación del crudo venezolano, el almacenamiento y una cuota de
mercado del 30 % de la distribución a nivel nacional. Todo esto se ha logrado
gracias al uso y abuso del poder para haber privatizado la cooperación,
supuestamente entre el Estado de Venezuela y Nicaragua. Como siempre ocurre en
estos casos, los dictadores de cualquier parte del mundo no se conforman con
“tan poco” y deciden ir por más, tomando en cuenta la hegemonía totalitaria y
totalizante que tienen de los mecanismos de poder, de una población atemorizada
y empobrecida y de una creciente riqueza que se reproduce enormemente, dado que
están en sectores claves de la economía. Ahora se presenta otro filón para
Ortega, precisamente en la industria energética, para crear un nuevo monopolio,
más rapaz, más agresivo y mucho más perjudicial para la población nicaragüense.
La construcción de este nuevo monopolio tiene el mismo
origen en el anterior, la importación del crudo venezolano que le permite ser
el único importador y proveedor del Bunker, materia prima esencial para echar a
andar las generadoras de energía. Se calcula que son 2 millones de barriles, a
100 dólares el barril, los que se entregan anualmente a estos agentes
económicos. Esto deja 200 Millones de Dólares en el inicio de la cadena, nada
despreciables para el tamaño de nuestra economía. El siguiente eslabón de la
cadena lo constituye la generación energética, actual y potencial. Al día de
hoy, el grupo de la familia Ortega – Murillo tiene 600 Mega Watts de Capacidad
Instalada, suficiente para abastecer la demanda nacional (durante el año 2011 la demanda
máxima anual en promedio fue de 569.5 MW). Dicha Capacidad Instalada no nació
de la noche a la mañana, ni fue heredada, ni mucho menos donada por algún jeque
árabe. Sencillamente nació de la privatización amañada, fraudulenta e ilegal
que hicieron de las plantas generadoras regaladas al pueblo nicaragüense por los
gobiernos de Taiwán y Venezuela, para, precisamente paliar los famosos apagones
que hicieron tanto estrago en nuestra economía durante los años 80’s y 90’s,
que también es necesario recordarlo, el naciente orteguismo surgido durante los
famosos 16 años de gobiernos neo liberales, se opuso desde la Asamblea Nacional
a aprobar proyectos de generación de energía mayores de 5 Mega Watts a través
de una Ley que regulaba el tema. Por supuesto que una vez llegado al poder, lo
primero que hicieron fue derogar la misma.
Los 600 MW de capacidad instalada dejan otra millonada de
dólares a las rebosantes arcas del grupo empresarial de la familia gobernante,
pues gracias a un convenio con el Ministerio de Energía y Minas, MEM, se tienen
que pagar US $ 14.0352 por Kilowatt hora de potencia instalada durante los 15
años que dura dicho convenio. Para tener una pequeña idea de lo que esto
representa, solo basta recurrir a una sencilla operación: convertir los 600
MegaWatt a Kilowatt y multiplicar esto por 14.0352, luego multiplicarlo por 12
meses de cada año y finalmente el resultado obtenido por 15 años. Nada
despreciable. Esta es la capacidad instalada actual, pero hablemos un poco de
la capacidad instalada potencial del Grupo de la familia. De acuerdo al Plan
Nacional de Desarrollo Humano 2012 –
2016, presentado por el Asesor Paul Oquist, los proyectos energéticos de Alba
Generación son dos: uno de generación geotérmica, ALBA GEO, de 35 MW a un costo
de 140 Millones de Dólares y otro de generación eólica, ALBA VIENTOS, en Rivas,
de 40 MW a un costo de 110 Millones de Dólares. Esto les daría una nueva
capacidad instalada de 675 MW. Pero aun hay más. Para nadie es un secreto que
el Grupo es parte de los inversionistas del Proyecto Hidroeléctrico TUMARIN,
cuya capacidad de generación serán 253 MW. El costo a la fecha es de 1,126
Millones de Dólares, con un costo de inversión por Mega Watt de 4.5 Millones de
Dólares y en esto habría que detenerse un poco. De acuerdo a investigaciones
realizadas por el economista independiente Adolfo Acevedo Vogl, los costos de
Proyectos Hidroeléctricos similares que se construyen en otros países y que son
financiados inclusive por el Banco Interamericano de Desarrollo, BID, distan
mucho de los costos que nos están anunciando y que van a repercutir en el cobro
futuro de la tarifa eléctrica en nuestros hogares.
TABLA
COMPARATIVA DE OTROS PROYECTOS HIDROELECTRICOS Y TUMARIN
PAIS
|
NOMBRE
DE LA
PLANTA
|
CAPACIDAD
INSTALADA
(MW)
|
COSTO
(MILLONES DE DOLARES)
|
INVERSION
POR MW
(MILLONES
DE DOLARES)
|
Ecuador
|
Sopladora
|
487
|
672
|
1.3
|
Chile
|
Alto Maipo
|
530
|
600
|
1.13
|
Chile
|
Angustura
|
316
|
420
|
1.3
|
Chile
|
Ralco
|
570
|
570
|
1
|
Chile
|
San Pedro
|
144
|
202
|
1.4
|
NICARAGUA
|
TUMARIN
|
253
|
1,126
|
4.5
|
Como puede apreciarse, el costo de Tumarin es tan alto
que cualquiera en su sano juicio recomendaría no construirla, pues la famosa
Matriz Energética no cambiaria en absoluto para la economía de los hogares
nicaragüenses ya que pagar la inversión resultará eterna y la tarifa energética
no disminuirá en por lo menos 30 años, según ellos mismos han estimado.
Dejando a un lado este elevadísimo costo, cuya cifra no
hace más que despertar las sospechas de la ciudadanía de que aquí se cuece algo
más, si sumamos los 253 MW al Grupo de la familia gobernante dado que estarían invirtiendo
en el mismo, tendrían nada más y nada menos que 928 MW, por mucho el de mayor
capacidad en todo Centroamérica. Ahora bien, haría falta el último eslabón de
la cadena: La Distribución. Actualmente, Gas Natural es la única distribuidora
de energía en el país, sin embargo se han hecho públicas las pretensiones del
gobierno de sacar de juego a la empresa española. Se aducen problemas de pérdida
de energía, las que ubican en 55 Millones de Dólares anuales, además está la
deuda que tienen con Alba Generación en concepto de compra de energía, la que
suma 80 Millones de Dólares, a la que se suma la deuda que tienen con bancos y
proveedores de energía, aproximadamente 70 Millones de Dólares. Estaríamos
hablando de 205 Millones de Dólares en una empresa cuyas operaciones están valoradas
en 340 Millones de Dólares en todo el país.
No dudamos que el pulpo empresarial de la familia
gobernante “le echo el ojo” a las operaciones de Gas Natural y al final se adueñará
de ella, ya que lograría tener el eslabón faltante que cerraría la cadena de un
nuevo monopolio, el que dejaría a todos los nicaragüenses a merced de los
Ortega – Murillo. Un monopolio que se estaría construyendo a partir del abuso
del poder para, en primer lugar, despojarnos a todos los ciudadanos de las plantas
generadoras que llegaron al país donadas por Taiwán y Venezuela y que los ha
convertido de la noche a la mañana en los máximos generadores de energía en
Nicaragua.
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ResponderEliminarMuy Interesante..
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