sábado, 12 de enero de 2013

DE BUITRES Y CARROÑEROS




Como si fuera una trágica comedia griega de muchísimos actos, la agonía a la que está sometido el Teniente Coronel Hugo Chávez Frías, retomando las palabras del Dr. Carlos Tunnerman, Ex Presidente de Venezuela, tiene en vilo a mundo y medio. Unos, legítimamente preocupados por la suerte del caudillo, la inmensa mayoría gente pobre que habita en los cordones de miseria que abundan en el país petrolero, a quien le agradecen haber sido tomados en cuenta como beneficiarios de las Misiones Bolivarianas, proyectos gubernamentales concebidos para satisfacer alguna necesidad inmediata de esta inmensa masa paupérrima, que lejos de disminuir, ha crecido considerablemente. Otros, preocupados por la orfandad política en la que quedarán, ya que el Comandante era el Alfa y el Omega del proyecto y como sucede con todos los caudillos de todas partes del mundo, se asumen eternos e inmortales, postergando para el final el incómodo asunto del relevo político. Otros, no menos legítimamente preocupados, estarán pensando en las inmensas riquezas acumuladas a la sombra de la enorme corrupción  desatada durante todos estos años de “revolución socialista” y que pueden perderla si las cosas cambian en Venezuela. Y finalmente, aquellos que, igual que “buitres y carroñeros”, están más preocupados por la suerte de la inmensa cooperación económica que ha llegado de rebote a sus manos, que por si vive o muere el Gran Benefactor.

Según Wikipedia, “Carroña es el nombre que recibe la carne podrida. Sirve de alimento a ciertos animales que se alimentan especialmente de cadáveres de animales no capturados por ellos mismos, por lo que son llamados carroñeros”. Esto hace suponer, esta vez retomando las palabras del comandante Ortega y asumiendo su “preocupación” por la oposición venezolana, a la que precisamente les ha llamado en tales términos, que hay muchos carroñeros que están esperando que se oficialice el deceso del Comandante Chávez, para caerle al cadáver y devorarlo. Pero como ellos mismos han expresado, a ningún partido de la Mesa de la Unidad Democrática le han enviado millones de barriles de petróleo cada año para que los paguen la mitad en tres meses y la otra mitad a 25 años. Tampoco a ninguna de estas agrupaciones políticas que conforman la mencionada coalición opositora, le han “donado” varias plantas de generación eléctrica para que se vuelvan de la noche a la mañana, los más grandes empresarios del sector energético. Por lo tanto, y de acuerdo a la opinión de ellos, los buitres y carroñeros están en otra parte y no en la MUD. 

Como siempre, arrogándose la delegación de todo el pueblo de Nicaragua, el comandante Ortega, una vez más, nos vuelve a dejar mal parados a nivel internacional. A estas alturas, ya debería de saber que existe una mayoría en el país, expresada en los recientes comicios municipales, que no comulgamos, ni con su gobierno, ni con sus desplantes, ni mucho menos con sus diatribas barriobajeras. No sabemos cuáles eran sus pretensiones con semejantes chabacanerías. A lo mejor quedar bien con los sucesores de Chávez y  dejarles claro que con él cuentan para esta y cualquier otra chambonada o violación a la Constitución, algo en lo que él puede darles cátedra, pues se ha vuelto un experto. La platita acumulada bien vale esto y más. O quizás quiso demostrar, que de todos los que llegaron, el es el más duro, violento y agresivo, porque así trata a los opositores en su patio. O a lo mejor lo que pretendía con su desafortunada intervención es agarrar cámara, para ocupar el espacio que está dejando Chávez como líder del ALBA, algo que de solo pensarlo mueve a risa. Una chaqueta demasiada ancha para tan poca percha.

Como quiera que haya sido, su pesadez solo ha hecho granjearse la animadversión y el repudio de los que, en un futuro no muy lejano, podrían llegar al poder en la Venezuela post chavista y lo más probable es que le recuerden, junto con las facturas de las plantas eléctricas y los millones de barriles de petróleo que han sido enviados por tantos años y que hay que pagar, las vulgaridades expresadas un 10 de Enero del 2012 y lo que es peor, en su propio país. Ahí veremos a muchos buitres alzar vuelo dejando una estela nauseabunda de corrupción, cuando se transforme en deuda pública la deuda privada que, como vil carroña, usufructuaron ilegal e inmoralmente y tengamos que pagar del presupuesto de la nación, vale decir de los impuestos que pagamos los nicaragüenses, todos los abusos cometidos por los ahora autollamados revolucionarios cristianos, socialistas y solidarios.