sábado, 12 de abril de 2014

A GALOPE TENDIDO


Así pareciera el comandante Ortega correr sobre los escombros de la institucionalidad del país, acompañado de la banda de forajidos, propios y asimilados, que le acompañan en su obsesión absurda de poder total, como si ya no fuera poco el que anteriormente tenía, lo que demuestra, de nuevo y como para convencer a los dizque incrédulos que aún le daban el beneficio de la duda, su verdadera esencia totalitaria.

Y es que el ADN de los dictadores, en todas las latitudes, les provoca este tipo de actuaciones: una obsesión compulsiva por el control hegemónico de todas las instancias del poder político, con el ingrediente adicional de la creencia, por parte de quienes detentan el poder actualmente en nuestro país, de que los nicaragüenses aguantamos todo, por el solo hecho de que la población quedó harta de los dos últimos ciclos sangrientos de violencia y nadie quiere el retorno de la guerra.

Estos últimos días, acompañados de los movimientos sísmicos que tienen en justificada alerta a la población, los movimientos políticos han estremecido aún más, los ya casi colapsados cimientos de la nación. Con los nombramientos de los cargos en las dependencias del “chinamo” que administra la pareja presidencial, y que eufemísticamente damos en llamar estado, se completa el proceso demoledor iniciado este año con las reformas constitucionales y al código de organización militar.

Es importante analizar la actuación de quienes estuvieron involucrados y las previsibles consecuencias que en el mediano plazo esto puede tener.  

EL PLI EN SU LABERINTO.

Sucio yo, sucios todos, aquí no hay limpios. Esta pareciera que fue la consigna dicha por los operadores políticos del orteguismo al PLI desde el momento que decidieron sentarse a negociar. Todo pacto, negociación, pláticas o como hayan querido llamarle, tiene un costo. El Gral. José María Moncada pagó un costo al negociar el Pacto del Espino Negro con Mr. Henry Stimson; el Gral. Emiliano Chamorro pagó un costo al negociar con Somoza García el Pacto de los Generales; el Dr. Fernando Agüero Rocha pagó un costo al negociar el Kupia Kumi con Somoza Debayle y el Dr. Arnoldo Alemán pagó un costo cuando negoció el Pacto de los Mengalos con el comandante Daniel Ortega. Acaso se pensaba que Eduardo Montealegre no iba a pagar ningún costo?

El voto obligatorio de la bancada del PLI a la “elección” del prístino y puro Robertito José era el costo a pagar, a cambio de dos cargos propios, más dos adoptados. Ante la negativa de asumir dicho costo, lo que hubiera dejado al partido, ante los nicaragüenses y ante la historia, en iguales condiciones que el PLC, saltó la verdadera esencia del orteguismo con las acusaciones del Jefe de Bancada hacia una de las candidatas propuestas, dándose cuenta la población de lo que ellos, el orteguismo, sabían y mantenían oculto y que hubiera dejado a la candidata en la condición de rehén política, algo que a Ortega le encanta tener. 

Y los espacios políticos que había que recuperar y de los que tanto se hablaba en los últimos días? Probablemente queden un par de lecciones aprendidas en esta jornada, una de ellas es que los espacios que verdaderamente importan se alcanzan con la gente, siendo coherentes en el accionar político, actuando con firmeza ante el poder; y la otra lección es que Ortega jamás negocia en condiciones de igualdad y sobre todo nunca cumple lo que promete y firma. Así fue en Sapoa, así fue en la transición con doña Violeta Barrios de Chamorro, así fue con Alemán, así fue con Bolaños. Porque iba a ser diferente ahora?  Recuérdenlo amigos del PLI, está en su ADN.


EL USO DE LOS DESPOJOS DEL PLC.

Si algo ha quedado demostrado en estos nombramientos, es que para Ortega vale más socio viejo, que nuevo por conocer. La consigna que se oyó desde la Asamblea Nacional hasta la Hacienda El Chile fue: El Pacto Vive, la Chanfaina Sigue! Sobre los despojos de lo que fue un pujante partido de oposición en los años 90’s y venido a mucho menos luego del pacto del 2000, se confirmó que Arnoldo Alemán es una suerte de sicario político de Ortega, quien lo usa a su gusto y antojo cuando el negociante de turno se resiste a degustar los caramelos envenenados que le ofrece. Algo así como el “gallo careador” que utiliza Daniel “el sacador”, pero que siempre obtiene un premio por tan deleznable misión. Habrá que ver si las pocas bases que aún quedan en el PLC continúan atadas a un liderazgo que se afana en mantenerse en el fondo del sumidero y se ufana de permanecer en dicho lugar. Con la nariz tapada hay que decirle: Paz a sus Restos!

UNA CRISIS EN EL HORIZONTE.

45 mil pequeños productores de café abandonados a su suerte después de más de un año de aparición de la Roya, solo demuestra la irresponsabilidad y la esencia de este gobierno. Han sido olvidados campantemente y no pocos están cayendo en manos de los inescrupulosos oportunistas de siempre, que como verdaderos geófagos se han dado a la tarea de ampliar los latifundios que ya tenían. Sumado a esto, hay que agregar que más de 90 mil empleos temporales se han perdido por la misma causa y se prevé en el cortísimo plazo una crisis alimentaria en la zona norte. Fácil es deducir el camino que puede seguir esta masa campesina, paupérrima, sin trabajo y sin tierras, sobre todo cuando el susurro de los grupos armados que merodean en el norte les resuena en los oídos.

Con cerca de dos millones de quintales de déficit en la cosecha más importante del año, la producción de frijol podría crear una crisis en el corto plazo. ENABAS ha sido incapaz de establecer las reservas necesarias para evitar estos desajustes y mantener el balance de precios, sin que se afecten los productores en sus costos de producción, ni sufran los consumidores con los precios en el mercado. Incapaz siquiera de planificar las ventas al exterior, el cambio de la matriz productiva del frijol impulsada por el MAGFOR con la ampliación de las áreas de siembra de frijol negro, ha dejado con más preocupaciones que alegrías a los que se acogieron a tal medida. 300 mil quintales excedentes que Venezuela no los comprará y sin la previsión de una eventual demanda de los mercados de México y Costa Rica, solamente demuestran que este gobierno está para todo menos para gobernar.

La disminución casi a cero de los recursos venezolanos que venían a fortalecer el presupuesto nacional solo presagia más deterioro a la escuálida economía familiar de los nicaragüenses. La situación política, social y económica de Venezuela no da para más y sentarse a dialogar con la oposición era la única forma de comprar más tiempo de vida. Esto ha provocado que los programas clientelistas del gobierno sean financiados con el presupuesto nacional, afectando otras partidas presupuestarias, educación y salud por ejemplo. El petróleo seguirá llegando, mas no en las condiciones iniciales, y en previsión a una eventual suspensión de los envíos, tal a como está sucediendo con los 120 mil barriles diarios que no están llegando a Cuba con la regularidad acostumbrada, el gobierno se ha dado a la tarea de mantener artificialmente los precios altos, de acuerdo a la variación de precios del crudo WTI (crudo de Texas), como un mecanismo de ir acostumbrando a los nicaragüenses a dichas variaciones. Si fallase el suministro de petróleo de Venezuela, las compras se harían a los Estados Unidos, total, los únicos compradores autorizados por ley son ellos y en la práctica quienes imponen los precios de los combustibles. Esa es una de las razones del porque tenemos los precios más altos en Centroamérica y en consecuencia que los precios de la canasta básica continúen su escalada alcista.

Con estos y otros elementos, se podría ir formando en el país una crisis en ebullición en el mediano plazo, ni siquiera azuzada por agentes externos, llámese la oposición fascista, el imperialismo yanqui o el neocolonialismo europeo, sino creada por la incapacidad gubernamental y la desmedida ambición de poder y riquezas de quienes tienen en sus manos las riendas del país. Si a esto le añadimos un nuevo fraude en el 2016, anunciado en esta semana desde el seno mismo de la Asamblea Nacional con la reelección de los fraudulentos del CSE, el panorama no podría ser menos sombrío. El orteguismo ha demostrado su temor por las “Primaveras Árabes”, la rebelión civil en Ucrania y ahora el “guarimbeo” en Venezuela, acusando sin ton ni son a todos los que no comulgan con él, de querer propiciar esas condiciones en Nicaragua. 

Sin embargo, la historia enseña que en nuestro país la población actúa de manera más pendular que “primaveral”. Aguanta, es cierto, pero cuando se cansa y actúa, va hacia el otro extremo. Somoza y la Revolución, para citar algo lejano, lo demuestran. El recuerdo de La Paz Centro en el 2008, más cercano en el tiempo, cuando la población enardecida arrasó con la estación policial por el asesinato de un joven a manos de un agente de la fuerza pública, debería llamar a la reflexión a quienes continúan con el abuso de la paciencia de la ciudadanía. Los afectados por la Insuficiencia Renal Crónica se tomaron las calles de Chichigalpa y solamente fueron sometidos por la brutal represión policial, al igual que lo fueron en su momento los productores de frijol en Condega, o los desmovilizados del Servicio Militar Patriótico que protestaban por sus justas demandas.

El péndulo de la paciencia del nicaragüense no sabe de primaveras árabes. Ahorita Ortega corre como desbocado, a galope tendido sobre los restos de la democracia, la institucionalidad y el estado de derecho, igual que lo hicieron en su momento los Somoza, los Trujillo, los Pérez Jiménez, los Gadafi. Sin embargo, no está de más recordar que en su momento a todos ellos los botó el caballo.