“Quien no
aprende de sus errores
está
condenado a repetirlos”.
Francisco de Goya
Pintor español del Siglo 17.
Finalizadas las elecciones municipales, se hace necesaria
una recapitulación de lo acontecido, ya que el análisis de lo vivido da a la
ciudadanía una idea del presente y el futuro inmediato que le espera a nuestro
país. Para nadie debió haber sido una sorpresa los resultados anunciados por el
Consejo Supremo Electoral, sin embargo, para muchos sí tuvo que haber sido una
sorpresa la respuesta popular durante esta jornada que finalizó el 4 de
noviembre y sobre todo, las lecciones que nos dejan estos comicios. Desde
nuestra posición de Militares Retirados, actores de una parte importante de la
historia de nuestro país, queremos interpretar el mensaje dado por el pueblo
nicaragüense en estas elecciones, un mensaje expresado en altas y claras voces,
que deben de conducir a la necesaria reflexión.
1.- COLAPSO DEL SISTEMA ELECTORAL TODAVIA
VIGENTE EN EL PAIS.
El
15 de Marzo de este año expresamos que: “La
realización de elecciones municipales previstas para noviembre de este año,
resultan inaceptables si no hay un nuevo Consejo Supremo Electoral, si no se
producen las condiciones de transparencia e independencia de dicho órgano, así
como las reformas electorales reclamadas por varios organismos de la sociedad
civil, que den las garantías necesarias a la ciudadanía para ejercer el
sufragio universal, libre y secreto, tal a como lo recomendaron los
Observadores Electorales Nacionales y las Misiones de Observación Electoral de
la OEA y la Unión Europea”.
Como
respuesta, Daniel Ortega ofreció a la comunidad internacional un remedo de
Reformas Electorales y a la ciudadanía nicaragüense la profundización de su
ilegitimidad, sepultando cualquier esperanza en la restauración de la
credibilidad del Consejo Supremo Electoral. Ilegalidad de Magistraturas de
facto en el máximo órgano electoral; cedulación partidaria; abuso en la
cartografía electoral; amañada y tramposa distribución de las presidencias de
CED y CEM; verificación fraudulenta; discrecionalidad absoluta en el manejo del
Padrón Electoral; negativa a la observación electoral nacional e internacional
independiente; eliminación antojadiza de candidaturas inconvenientes para el
partido de gobierno; contingentes militares votando en lugares donde el
orteguismo históricamente ha perdido;
ratón loco; urnas preñadas; aperturas y cierres anómalos de JRV;
coordinadores de CV actuando como comisarios políticos del partido de gobierno;
alteración de actas; cambio de cómputos finales en algunos municipios dando
como ganadores a los perdedores, entre otras irregularidades, confirman el
colapso del Sistema Electoral Nicaragüense y la urgencia de su restauración
total. No se puede pensar en el 2016 sin antes transformar por completo, no el
Consejo Supremo Electoral, sino TODO EL SISTEMA ELECTORAL. Pensar en
candidaturas futuras, en procesos de primarias, en pretender hacer borrón y
cuenta nueva con el mismo SISTEMA ELECTORAL, es ser cómplices de un nuevo
fraude en las próximas elecciones.
2.- MUERTE Y SEPULTURA DEL ZANCUDISMO.
En
nuestro documento “ANTE LA CONSOLIDACION DE LA DICTADURA, LA UNIDAD DE LA NACION”
de Marzo pasado, decíamos que: “La
repetición del fraude es casi un hecho, por lo que advertimos un abrumador
nivel de abstencionismo, ante la peligrosa pérdida de confianza de la población
en el sistema electoral, en la clase política y en los partidos políticos. Denunciamos desde ya a aquellos partidos
políticos, que con su participación en estas condiciones, no harán más que
legitimar al régimen, convirtiéndose en cómplices de la dictadura y
colaboracionistas zancudos a los que el pueblo, en su momento, exigirá cuentas”.
Los
resultados palpados a lo largo y ancho del territorio nacional nos han dado la
razón. El pueblo nicaragüense, mayoritariamente, se abstuvo de votar,
convirtiéndose el abstencionismo, en la primera fuerza política del país, en la
mayoría silenciosa que se ha pronunciado de manera inequívoca, dando la espalda
a aquellos partidos políticos que han hecho del zancudismo un modo de vida y una práctica despreciable.
Juntos ALN, APRE y PC sumaron el 1.61 % del total de votos depositados en las
urnas. Sin embargo, a conveniencia del régimen, se mantienen, como muertos
vivientes, deambulando en los procesos electorales como legitimadores de los
mismos.
3.- FRACASO DEL LIDERAZGO POLITICO
TRADICIONALISTA EN NUESTRO PAIS.
Algunos
líderes han convertido a la política en el arte de hacer lo posible para
beneficiarse ellos mismos y a las cúpulas que representan. Una vez más no han
escuchado al soberano. Tozudamente se niegan a oír los gritos de la población
que demanda decoro y firmeza a los dirigentes de los partidos, quienes han
hecho de la continuidad del tradicionalismo político una práctica de
sobrevivencia y pusilanimidad. Sin embargo, no todo es tan desalentador. Con
esperanza vemos como han surgido líderes locales y territoriales, que con
gallardía se enfrentan cívica y patrióticamente, en desigual lucha contra las
fuerzas oscuras del orteguismo. Demandamos al liderazgo nacional de estos
partidos políticos a dar la cara en los territorios y cumplir las promesas de
defender el voto robado en las urnas.
4.- RECHAZO AL ORTEGUISMO.
Si
algo ha quedado claro en estos comicios electorales, es el inmenso rechazo de
la mayoría de la población al orteguismo. De nada ha valido la pretensión de
comprar la conciencia de los más desposeídos con programas clientelistas y
regalías que laceran la dignidad de las personas. Sumada la abstención y los
votos en contra, se comprueba fácilmente que el orteguismo continúa siendo
minoría en el país. El rechazo al sistema que representan, no solo se ubica
afuera de las filas del partido de gobierno, sino que dentro del mismo. Las
expresiones en contra del dedazo por la Vieja Guardia del sandinismo, de los
oficiales retirados del EPS y MINT, desmovilizados del Servicio Militar
Patriótico, SMP, los movimientos de Sandinistas Históricos apartados por “la
nueva savia, la juventud eterna” que proclaman desde las alturas la pareja
presidencial, son una muestra inequívoca de que el orteguismo solamente se
mantiene por la enorme fortuna generada por la cooperación venezolana y amasada de manera ilícita y corrupta, su
alianza con el Gran Capital y un sector de la clase empresarial parasitaria, con
un sector minoritario de las iglesias y con políticos inescrupulosos que
solamente les importa su propio bienestar.
Nunca
ha sido tan evidente el divorcio del orteguismo con el verdadero sandinismo
como en estas elecciones municipales. Un partido que nació de la épica
guerrillera, con una propuesta ética a la población, con líderes cuyo
comportamiento revolucionario jamás estuvo en duda, que compartieron el
sufrimiento del pueblo, que lucharon y murieron por su redención, no puede ser
sustituido por quienes han hecho del robo de votos y elecciones, su modo de
llegar y perpetuarse en el poder; no puede ser sustituido por quienes han hecho
del usufructo del poder, el mecanismo para el enriquecimiento ilícito personal;
no puede ser sustituido por quienes han sustituido valores y principios, por
poder y dinero. El Sandinismo ha sido sustituido por el Orteguismo, una réplica
mejorada y corregida del Somocismo.
5.- EL RENACER DE UNA NUEVA ESPERANZA.
Con
profunda esperanza y optimismo vemos el surgimiento de una nueva mayoría en
nuestro país, el renacer de una nueva esperanza, que se expresó este 4 de Noviembre con su
participación abstencionista de manera activa, beligerante y que con absoluta
claridad ha dicho: BASTA YA, NO MAS ORTEGUISMO!, NO MAS FRAUDES
ELECTORALES!. Es imposible maquillar cifras de participación en estos
fraudulentos comicios, cuando el rechazo de la ciudadanía ha sido tan evidente.
En la profundidad de la montaña del llamado Corredor de la Guerra y en los
municipios del centro y norte del país, donde todavía se reclama en las calles
en contra del robo de las alcaldías; en toda la zona del Pacifico y en la
ciudad capital, surge un nuevo sentimiento, la perspectiva alentadora de nuevas
formas de lucha, la posibilidad de novedosas formas de organización, más
efectivas, mas incluyentes y horizontales, alejadas del tradicionalismo
político que preserva las ataduras atávicas a los caudillos, viejos y nuevos.
Líderes de barrios, dirigentes gremiales, líderes municipales, departamentales,
organizaciones de la sociedad civil, movimientos y organizaciones políticas que
ni se han vendido, ni se han rendido, son la Nueva Esperanza Democrática para Nicaragua. Hacemos un llamado a la
población para la movilización cívica y pacífica en defensa de sus intereses,
apoyando los liderazgos que en la lucha por las reivindicaciones ciudadanas
están surgiendo a lo largo y ancho del país.
Una
vez más, llamamos a la UNIDAD de la Nación para alcanzar JUSTICIA, DEMOCRACIA Y
PAZ.
GRUPO PATRIOTICO DE MILITARES RETIRADOS (GPMR)
12
DE NOVIEMBRE DEL 2012.
Coronel
(R) Carlos Brenes Sánchez
Teniente
Coronel (R) Irving Dávila Escobar
Teniente
Coronel (R) Francisco Enríquez Torrentes
Mayor
(R) Roberto Samcam Ruiz
Capitán
(R) Sergio Martínez Vega
Capitán
(R) Pedro Rivas Guatemala
Capitán
(R) Claudio Selva Salamanca
No hay comentarios:
Publicar un comentario